LuisPastor3El próximo viernes 12 de abril tendremos el placer de escuchar en el Teatro Leal de La Laguna la presentación del trabajo ‘¿Qué fue de los cantautores?’ de Luis Pastor que viene también con la labor de Pedro Pastor. Con motivo de lo cual establecemos contacto y vamos poco a poco descubriendo detalles de lo que ha sido ese último disco en el presente del extremeño y en qué consiste un concierto de nuestro protagonista en pleno 2013 ¿Pueden los cantautores conservar la vigencia con todo lo que ha llovido? ¿Cómo fue el comienzo en la música? Éstas y otras preguntas nos responderá con su amabilidad habitual un Pastor que está acostumbrado a llevar su música como bandera de sinceridad, como poesía comprometida con su tiempo.

Sin embargo, parece que en este disco algo ha cambiado. Según nos confirma el propio cantautor ha hecho recopilación de lo que para él ha sido música dormida en el subconsciente. Se ha reconciliado con el chotis o con la música de copla y hasta con el fado si es que alguna vez hubo divorcio. Ése es el viaje que propone este artista nacido en Extremadura, inmigrante al madrileño barrio de Vallecas y portugués de corazón. Hemos preguntado también sobre sus afinidades con poetas y literatos de excepción como José Saramago e incluso con el mágico tacto de Pablo Guerrero (de enhorabuena a propósito después de la publicación del disco-libro ‘Lobos sin dueño’, Warner Music Spain). Todo eso y algo más, si cabe, la actuación prevista de Pedro Pastor, el próximo viernes 12 de abril, a las 21.00 horas en el Teatro Leal de la Ciudad de los Adelantados.

– Nos gustaría saber algo más de su incorporación a la música ¿Cómo nació en usted la necesidad de hacer canciones y presentarlas al público? ¿Cómo fue la génesis artística?

– Luis Pastor: Comencé con la compra de mi primera guitarra cuando cumplí los 15 o 16 años y a la par descubrí a los grandes poetas, los denominados poetas del exilio. Empecé cantando en la parroquia de mi barrio, Vallecas. Habían algunos curas obreros que de alguna manera nos ayudaban a los niños emigrantes de aquella generación de la clase campesina. Veníamos sin cultura y sin formación y creo que fue ahí donde me hice el cantante que he sido. Si no hubiera emigrado hubiese sido otro tipo de cantante. Desde muy niño me gustó la música, era un cantarín, era algo así como Joselito y a los 13 fui al concurso ‘Vale todo’ de Radio Nacional, a cantar a Manolo Escobar. La realidad social y vecinal, el orgullo de pertenecer a la clase trabajadora con la cabeza alta por los orígenes y sin ningún complejo.

– Viene a presentar en el Teatro Leal ‘¿Qué fue de los cantautores?’ ¿Cómo fue el parto? ¿Qué nos cuenta de este disco nuevo?

– L.P.: El parto tuvo que ver con esa primera canción que fue una poesía primero. He vuelto a unos estilos que abandoné desde joven. En el disco duro de mi infancia hay una música que he querido retomar en este disco. Esto permanece pero yo no he querido desarrollarlo, he ido aprendiendo de otros cantantes a lo largo de estos años. Desde que descubrí a los músicos como José Afonso y a los compañeros de viaje de los años 70, los músicos de Angola, Mozambique, Cabo Verde, que eran colonias portuguesas y entendían las palabras que decían esas canciones. Yo he trabajado hace años con la música de los artistas brasileños pero ahora tenía que retomar otra parte del legado musical que forma parte de mis señas de identidad. En este disco hay un fado, por ejemplo. Es como si fuese una copla, ya que son primos hermanos. También hay un chotis. Hay, en definitiva, fórmulas musicales muy dispares y que yo me negaba a hacer. En la génesis de ese disco está mi propia historia, la necesidad de contar el acontecer de la canción de autor en 40 años, vista por alguien que la ha vivido y que la sigue viviendo. Yo la he asumido y la he llevado con orgullo. El concepto de cantautor en este país desde los 70 es una acepción cargada de negatividad, tiene un aspecto de músico ‘aburrido, coñazo’. Esa negatividad ha llevado a que muchos nos hemos sumado en un papel en el que hemos repudiado las modas durante décadas y hemos tenido el orgullo de haber sido lo que hemos sido, nada más. Hemos hecho un manifiesto en la canción que da título al disco y un recuerdo a los que ya no están.

«Tengo en el ordenador de Lourdes, en proyecto, un libro-disco de poetas y pintores canarios. Lo tengo construido pero por distintas circunstancias no lo he podido grabar. Se iba a registrar el verano que falleció José Antonio Ramos, el timplista, era una propuesta que yo quería realizar con él»

– Muchas personalidades del arte y no sólo de la música ¿Tiró usted de agenda?

– L.P.: El video fue responsabilidad de Lourdes Guerra y la verdad es que tiramos de amigos y de agenda, como dices. Y una vez que se inició la rueda no hubo que llamar a nadie más, ellos mismos se ofrecieron a salir en el videoclip. A muchos de los que salen en el videoclip ni los conocía pero se habían visto reflejados en lo que cuento en esta canción ‘¿Qué fue de los cantautores?’ ya que el video fue un suceso bastante interesante por las redes sociales, youtube y facebook. Fue un recitado en el Círculo de Bellas Artes en la presentación de un libro con Pilar del Río sobre José Saramago y cantamos también del disco de ese literato. Pilar ya conocía ese poema y me lo hizo recitar. Hubo 200.00 visitas en 3 meses y funcionó mucho el trabajo viral. También hay muchos amigos en ese video. También metimos a nuevos y jóvenes cantautores como mi hijo Pedro, María Rozalén, Andrés Sudón o Pascual Cantero alias ‘Muerdo’. Hemos incluido raperos como el Langui de La Excepción y Chojín.

– Ha nombrado la figura del Nobel de Literatura, José Saramago y no podemos dejar de preguntarle por ese portugués universal ¿Qué recuerdos tiene de Saramago?

– L.P.: Los recuerdos que tengo de José Saramago están ligados al libro-disco anterior que llevó por título ‘En esta esquina del tiempo’ contenía dos discos uno en portugués y otro en castellano, todos textos de José. Yo lo conocí en Lanzarote donde le hicieron un tributo como hijo adoptivo. Yo estaba pasando unos días de Navidad con la familia en Güimar y habían llamado a Pedro Guerra para cantar en los Jameos del Agua y Pedro había presentado algunas musicalizaciones del mismo Saramago. Yo me fui con él y canté algunas canciones en portugués. El día siguiente estuvimos en su casa haciendo un reportaje para la televisión portuguesa RPT. Entablamos una relación de amistad que hizo vincularse a este proyecto, asistió conmigo a la presentación del disco en Rivas, en Madrid. Fue una tremenda suerte encontrarme con él, siempre supuse que iba a grabar un disco en portugués, quizás un tributo a José Afonso o algo así. Al regalarme ese libro de poemas, que algunos tenían 40 años, no me lo pensé dos veces. Tengo anécdotas preciosas con él y de nuestros encuentros, incluso cuando le puse la maqueta aquí por primera vez en Madrid, por ejemplo.

– ¿Cómo es el formato en vivo? ¿No tiene el set list muy cerrado?

– L.P.: Cuando yo presenté mi disco en Galileo, la primera vez, hice el disco entero, sin ninguna concesión. Después va pasando el tiempo y voy añadiendo algunas de las canciones de siempre. Se podría decir que voy con los bolsillos vacíos y poco a poco los bolsillos se van llenando de lo que me apetece cantar. Entonces naturalmente toco canciones del nuevo disco y también algunas que me pidan, no estoy cerrado para nada. A veces es lo que me pide el cuerpo o el alma en ese momento.

– Ya tiene usted como 20 disco ¿Le falta algo a qué cantarle?

– L.P.: Yo no tengo esa sensación porque creo que las canciones se hacen ellas mismas. A veces parece que uno no es el que hace o el que gesta de alguna manera el tema. Las cosas vienen por sí solas. Antes del disco-libro de Saramago grabé un disco que iba a llamarse ‘El color de los días’ que fue grabado en Sao Paulo y que al final se llamó ‘Pásalo’ y sin pretenderlo, todas las letras eran mías salvo un tema final que era de Fernando Pessoa, cuando yo me vine de la ciudad de Brasil el productor Chico César se quedó en la mezcla y cambió el orden. Yo quería acabar con el poema de Pessoa. Eso quiere decir que sin quererlo ya estaba anunciando que el siguiente álbum iba a ser de un escritor portugués, como lo era Saramago. No es uno el que se enfrenta a una temática sino que es la temática quien se encarga de decir ‘aquí estoy’.

– Y ahora ¿Qué planes de futuro inmediato tiene? ¿Qué le va a deparar los próximos meses o años?

– L.P.: Tengo en el ordenador de Lourdes, en proyecto, un libro-disco de poetas y pintores canarios. Lo tengo construido pero por distintas circunstancias no lo he podido grabar. Se iba a grabar el verano que falleció José Antonio Ramos, el timplista, era una propuesta que yo quería realizar con él. Con sus arreglos y mis temas. Sobrevino su desgraciada muerte y está esperando el disco. Tengo claro que eso lo quiero grabar. También tengo pensado grabar 20 canciones de Miguel Hernández, que compuse hace 3 años cuando celebrábamos el centenario de su nacimiento. Estas canciones las he regalado a gente como Carmen Linares que la tiene en un espectáculo o Jarcha que ha grabado nueve de ellas o Juan Valderrama que grabó una. Yo no quise grabar ese disco porque era muy flamenco, muy popular, como eso que antes hablábamos del ‘disco duro de mi niñez’ pero es algo que en el fondo me apetece. Después de eso, no sé lo que vendrá. Vendrá lo que me revele el papel en blanco. Siento que la vida son círculos que abrimos y cerramos. Yo comencé musicalizando a los poetas en los años 70. En cada disco sólo hacía una letra por falta de capacidad. Mi triunfo, en estos años, ha sido aprender a contar sentimientos y mis emociones. Ser el espejo de mi alma. Siento que estoy, sin intentarlo, volviendo a los poetas. Son los casos de los Saramago, los poetas canarios o Miguel Hernández. A lo mejor, lo que tenía que contar ya lo he contado y me llena más lo que me cuente un poeta. Quizás yo me remito. La creatividad no está sujeto a unos cánones ni a una estructura prefijada. Yo sólo me he educado con una formación autodidacta con lo que he leído desde que era niño. No tengo la varita mágica pero creo que soy un ser especial en la capacidad que tengo ya que la música habita en mí. Me realizo. Cuando yo sienta que eso falla no volveré a cantar pero creo que no va a pasar.

– Eso esperamos todos, que no pase. Habla usted de poetas canarios ¿Cree que están olvidados incluso en estas Islas? ¿Falta reconocimiento?

– L.P.: Yo creo que sí. Yo conocía a algunos grandes poetas como Millares Sall, había intentado a los 17 años musicalizarlos pero nunca los grabé. Cuando yo me puse a pensar en los poetas canarios lo que hice es leer mucho y descubrir a mucha gente que ni sabía que existía. A lo largo de la historia ha existido siempre un agravio comparativo entre los poetas de la península y poetas insulares. Ellos han jugado con la desventaja de la distancia y de la insularidad y del mundo que impregna el alma de un isleña. Hay voces que son muy poco reconocidas en las propias islas hoy en día y hace falta, precisamente, el reconocimiento y el homenaje, claro que sí.

– No podemos tener a un personaje republicano confeso como es usted, y aprovechando que se acerca el 14 de abril, sin preguntarle sobre la situación de la monarquía en España ¿Cree usted que está haciendo más por el republicanismo la propia monarquía que cualquier grupo que sea cercano a esa ideología?

– L.P.: (risas) En estos últimos años ha hecho más por la República la propia Monarquía que la gente de ideas republicanas. Es verdad que la monarquía se ha ganado en los tiempos de la transición un papel de equilibrio entre la sociedad española que ha sido una sociedad dividida como ha sido siempre entre una derecha recalcitrante que en los 80 parecían que se asumían como demócratas y que abandonaban esa concepción de «españoles de primera» como digo en algún poema. En los últimos años eso parece haber cambiado. Era difícil el resquicio que quedaba para que la República abriese un camino. Vivimos un momento convulso en el que nos obligamos a replanteárnoslo todo. Es cierto que la Monarquía pasa por sus peores momentos más críticos y parece que si alguna vez llega otro forma de Estado será por las propias faltas. Las faltas de los políticos que han hecho y desecho y han abusado de su privilegio en los últimos años y eso en unos momentos en que a las gentes se les están quitando unos derechos que habíamos ganado después de un siglo o más de lucha. Estamos volviéndonos a plantear todo de la noche a la mañana. Nadie sabe lo que va a pasar pero es cierto que ya no son intocables como lo eran hace nada. Ellos fueron puestos por Franco y naturalmente, para representar a la sociedad española, tienen que ser elegidos por la misma. Por lo que dicen las encuestas, cada día tienen menos eco por el mal ejemplo que están dando y porque viven de la ‘sopa boba’ y porque no tenemos que ser ya súbditos.

– Viene a actuar a La Laguna, al Teatro Leal ¿Es especial para usted? ¿Qué se puede esperar del concierto?

– L.P.: No recuerdo haber actuado en el Leal, la verdad. He actuado muchas veces en La Laguna como en la Universidad. La primera vez que estuve en La Laguna fue en el año 76 cuando me prohibieron todos los conciertos en los barrios obreros. En La Laguna también lo prohibieron y acabé cantando en un colegio de monjas. Siento que Tenerife es mi destino y mi futuro. Me veo viviendo en las islas, de aquí a poco y no a mucho. Pensé cuando era más joven que me iba a retirar en mi pueblo pero me puede más el sol, el mar, las gentes de la isla y su forma de hablar. Es una doble alegría la que me supone ir a Tenerife, la alegría de cantar como siempre lo hago pero también la cercanía de la familia. El sentimiento de que ahí tengo mi casa también.

– No queremos ni podemos olvidar su colaboración con el último trabajo de un extremeño de excepción también de la música de autor como es el caso de Pablo Guerrero, en su último ‘Lobos sin dueño’ incluyen una moderna versión de ‘A cántaros’, ese gran clásico ¿Qué siente en relación a este trabajo?

– L.P.: Casualmente, antes de ayer cantamos juntos en el local de Comisiones Obreras y hacía ya tiempo que no nos encontrábamos en el escenario. De los compañeros de viaje de la canción probablemente Pablo haya sido con el que haya colaborado más. He musicalizado letras suyas y cantaba ‘Evohé’, uno de sus temas fundamentales. Mi colaboración en el disco ha sido sólo cantar un verso y la verdad es que el álbum lo han plasmado ellos, Luis Mendo y su gente. Nos llamaron y canté lo que nos dijeron. Me hubiera encantado cantar más pero nos tocó lo que nos tocó (risas). El principio de la canción. Pablo para mi siempre ha supuesto el mejor poeta de todos los que nos dedicamos a escribir canciones, es poseedor de una sensibilidad especial, es un ser tremendo. A parte de la bondad y el cariño que irradia su figura, con la barba de los años 70. Es una bellísima persona y todo el mundo lo quiere. Es una de esas figuras que cuento en ¿Qué fue de los cantautores? Dimos muchos conciertos en la Extremadura de esos años de final del franquismo o de tierna democracia. Íbamos los dos, con músicos, los Guardias Civiles nos esperaban siempre en los pueblos por donde nos hallábamos.

– Nos resta por hacerle la preguntita de marras y de la que suponemos que está harto ¿Qué fue de los cantautores?

– L.P.: (risas) Mi respuesta es muy sencilla, mi respuesta es la cantidad de chavales que siguen apostando por esto quizás con 18 años que asumen en su discurso y poesía, música y actitud, en la manera de entender la canción la herencia de la vieja guardia de los cantautores de este país. Hicieron de la canción una manera de sentir la vida, en la poesía plasmar frustaciones, realidades sociales y verdades que nos separan a los que vivimos en este país con el resto del mundo. Pedrito (Pastor) será probablemente con su lenguaje mucho más internacional que yo. El mundo está más cerca a través de internet. Va por delante de la vieja guardia. Él y otros como él que están empezando ahora que se asomen a la desnudez de la poesía y la palabra con la guitarra o cualquier otro instrumento.

– Muchas gracias por este contacto, ¿Quiere mandar un ánimo para que la gente vaya al concierto? ¿Qué sorpresas nos deparará?

– L.P.: Más allá de la presentación de mi disco de ‘… los cantautores…’ también habrá un hueco para las canciones de Pedro Pastor. Él está presentando su disco con seis canciones, viene de músico mío pero habitualmente le dejo su tiempo para dos canciones, pero cuando está anunciado tiene que cantar más (risas). Él se niega porque dice siempre que el concierto es mío. Me gusta que cante ya que yo he hecho demasiado y creo que es una oportunidad para el público para que descubran a un autor que dará mucho que hablar. Les quiero mandar un abrazo fraterno y solidario a todos los lectores de creativacanaria.com ¡Hasta pronto!